Impotencia. Eso es lo que sintieron jugadores, cuerpo técnico, directiva y afición blaugrana ayer tras el Clásico. Rijkaard alineó finalmente a Deco y a Ronaldinho, pero ninguno de los dos estuvieron a la altura de las circunstancias, seguramente los dos fueron los menos afortunados en el día de ayer, y esta vez no fue por actitud.Ronaldinho lo intentó por la banda, por el centro, regateó, chutó, centró... pero nada. Sergio Ramos, Pepe, Cannavaro y Heinze estuvieron excelentes en la noche de ayer. Y cuando Eto'o, Iniesta, o en el tramo final Giovani o Bojan pudieron zafarse de la acertada defensa blanca, se encontraron con Casillas, que como siempre, salvó alguna que otra ocasión clara para dar la victoria a su equipo.
El resumen del partido es claro, un quiero y no puedo por parte de un Barça que pide a gritos un cambio de ciclo, frente a la contundencia de un Madrid muy serio atrás, y con un contragolpe rapidísimo, probablemente uno de los mejores contraataques del mundo. En uno de ellos, Baptista consiguió un tanto expectacular que nos recordó a su etapa en el Sevilla, y con esto se sigue reivindicando ante aquellos directivos merengues que en su día lo quisieron vender.
¿Soluciones para el Barça? Creo que el camino de Ronaldinho en la ciudad condal está llegando a su fin. No sé si volverá a ser el de antes, pero está claro que en el Barcelona no. No le sale nada, lo intenta, vuelve a regatear como antaño, encara, a veces hasta dribla, pero no pasa del segundo marcador. Otro que tal baila es Deco, que tampoco es el de antaño, falto de ritmo y con demasiadas imprecisiones, ya no golpea a puerta tanto ni tan eficazmente como antes, por lo cual su faceta goleadora se resiente, así como su repertorio de asistencias, cuyos números se ven mermados por la ya mencionada imprecisión por la que se caracteriza su juego actual.
El Real Madrid, por su parte, ha conseguido encontrar una filosofía de juego afín a su plantilla, y si la siguen llevando a cabo con tanto éxito como hasta ahora, tienen casi asegurada la Liga, aunque sigo pensando que está por debajo de muchos equipos europeos, contra los que no podrá hacer gala de su extraordinario juego a la contra, por lo que veo difícil que pueda levantar la Champions League este año.
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